lunes, 13 de agosto de 2007

Dolor en la despedida de tres dirigentes del PJ

Eduardo Arguinzoniz, Mario Locatelli y Julio Villemur fueron sepultados ayer en el Cementerio de General Pico. Fallecieron en el accidente que protagonizaron en la ruta 1, entre General Campos y Alpachiri.En medio de una generalizada congoja de familiares, amigos y compañeros de militancia, ayer fueron sepultados los tres piquenses fallecidos en el accidente ocurrido cuando regresaban de participar en Guatraché del encuentro de técnicos y profesionales del PJ que elaboran la plataforma partidaria.El gobernador Carlos Verna, el intendente Luis Campo y otras altas autoridades provinciales y municipales acompañaron a los familiares de Eduardo Arguinzoniz, Julio Villemur y Edgardo Mario Locatelli. También asistieron al velatorio los candidatos Oscar Mario Jorge y Jorge Tebes, del PJ, Juan Carlos Passo, de la UCR, y los concejales de la mayoría de los bloques locales.Arguinzoniz y Locatelli fueron velados en una capilla instalada en la sala de sesiones del Concejo Deliberante de General Pico, en la esquina de las calles 13 y 24. Villemur, en la sala velatoria de la calle 15 entre 26 y 28.Los cuerpos de las víctimas del choque frontal ocurrido sobre la ruta provincial 1 entre las localidades de General Campos y Alpachiri arribaron a General Pico alrededor de las 3 de la madrugada del domingo. Por cuestiones de jurisdicción, tras las actuaciones policiales realizadas en el lugar por la División Criminalística, fueron traslados a General Acha para que el forense de turno efectuara la autopsia correspondiente y certificara las causas de los fallecimientos.Cuando el personal del servicio funerario de Corpico habilitó los velatorios, a primera hora del domingo, comenzó un incesante desfile de allegados, que se sucedió hasta las últimas horas de la tarde. Las exequias de Arguinzoniz y Locatelli se cumplieron a las 17.30. Las de Villemur, pasadas las 18.30.Dolor.No hay muerte que no provoque profundo dolor entre los deudos, pero en estos casos el sentimiento fue más profundo aún, ya que los tres desaparecidos eran padres de hijos adolescentes que ayer no encontraron explicación ni consuelo.El gobernador Verna tampoco ocultó su consternación. No asistió a Guatraché porque debió viajar a Buenos Aires un día antes del encuentro, pero ayer, junto a su esposa, acompañó a los hijos de Arguinzoniz y Locatelli y fue uno de los que transportó el ataúd de este último desde la sala del Concejo Deliberante hasta el coche fúnebre.El cortejo por el sepelio de Julio Villemur hizo una parada en la sede de Pico Fútbol Club, sobre la Avenida San Martín, donde socios y simpatizantes albinegros le rindieron un homenaje a quien se desempeñaba como presidente de la entidad.
"La Arena"